Las fiestas navideñas presentan una oportunidad fantástica para practicar Mindfulness. Aquí van unas sugerencias que puedes probar, como si fuesen pequeños experimentos:
1. Comer (y beber)
Cuando comas (o bebas), presta atención plena a los 5 sentidos. Observa los movimientos que hace tu cuerpo para acercar la comida a la boca. Deja que el tenedor repose en el plato entre mordiscos. Mastica bien antes de tragar. Nota las sensaciones al engullir.
2. Dar un regalo
Cuando des un regalo a alguien, conecta con las sensaciones asociadas con la respiración en el abdomen y observa qué pensamientos y emociones surgen. Conecta con la otra persona. ¿Cuáles de las emociones son tuyas y cuáles son empáticas?
3. Recibir un regalo
Lo mismo que 2, cuando recibas un regalo de alguien.
4. Estar de vacaciones
Si notas una resistencia a un pensamiento o emoción difícil, en lugar de distraer la mente, investiga cómo te sientes al llevar la atención a las sensaciones físicas en el cuerpo. ¿Puedes permanecer con esas sensaciones? ¿Qué cualidades tienen? ¿Cómo cambian?
Las fiestas son un buen momento para estar con la familia. Haz una pausa y estate con la familia.
5. Gastar dinero
Cuando gastes dinero, lleva la atención a las sensaciones físicas en los pies y a cómo se distribuye tu peso en ellos. Conecta con tu propósito más profundo.
6. Escuchar
En lugar de bloquear el ruido de una cena o una fiesta, permite que todos los sonidos te lleguen a través de los oídos, sin analizarlos ni juzgarlos. ¿Notas más o menos resistencia en el cuerpo?
Cuando alguien te habla, presta atención plena a tu interlocutor y observa si surgen opiniones o pensamientos sobre lo que vas a decir y permite que éstos pasen a un segundo plano.
!Feliz Navidad!